Las plataformas flotantes modulares son uno de los grandes inventos náuticos de los últimos tiempos, pero a pesar de ello, para muchos su funcionamiento es desconocido. Por este motivo, desde Portal Náutico, os vamos a explicar en qué consiste este novedoso artilugio.
Lo primero que debes saber es que su configuración es parecida a la de las piezas de “Lego”, por lo que permiten crear un embarcadero a medida.
Qué es una plataforma flotante
En realidad se le llama plataforma flotante a todos aquellos que se encuentran en el mar, anclados al fondo con cierto grado de flexibilidad, sujetos por pocas vigas o directamente sin sujeción.
En esta ocasión, vamos a explicaros los muelles sin sujeción conocidos como muelles modulares, ya que para muchos son los grandes desconocidos.
Plataformas flotantes modulares
Las plataformas flotantes modulares son aquellos que están fabricados de un derivado del plástico que ofrece una gran resistencia y calidad.
Estos a su vez, se configuran en bloques al encajar unas piezas con otras hasta alcanzar la forma deseada según el tipo de embarcación. Destacan sobre todo por la capacidad que tienen para soportar grandes cargas de peso, llegando incluso a una tonelada por cada tres metros cuadrados de módulos.
Otra de sus especificaciones estrellas es la flexibilidad del conjunto que, a diferencia de los muelles flotantes rígidos, le permite absorber el movimiento del agua.
Cómo funciona
El sistema modular se basa en un conjunto de bloques encajados que permiten una configuración libre según el tipo de embarcación. Por esta razón, existen dos tipos de bloques: los básicos y los alternativos.
Bloque básico
El bloque básico tiene forma cuadrada, que al combinarse permiten crear la forma deseada. La función de estos es sencilla a la par de necesaria, ya que, al ser superficie peatonal, son los que permiten acceder a la embarcación. Además, son los encargados de mantener la estructura de los bloques de atraque por donde se deslizará la embarcación.
Bloques alternativos
Los bloques alternativos están enfocados al atraque de embarcaciones, a modo de vía o carril. Estos a su vez, van comprendidos entre los bloques básicos que se encargan de mantener la estructura.
Su gran ventaja respecto al resto de muelles es que evita los roces, arañazos y golpes contra los elementos del exterior. Es más, al ser una plataforma flotante, evitará que la embarcación esté en continuo contacto con el agua, permitiendo así una mejor conservación del casco.
Ventajas de una plataforma flotante modular
Las ventajas que ofrece la plataforma flotante modular son innumerables. Entre ellas, se encuentra su poco peso (5,5 kg por cubo) y su capacidad de resistencia (275 kg por cada metro cuadrado).
Otra de sus características que las diferencia del resto de plataformas flotantes es que no necesitan mantenimiento. Esto se debe a que la resina de polietileno, un material respetable con el medioambiente, es resistente a los agentes ambientales marítimos como la sal, microorganismos marinos y rayos UV.
Fácil instalación
Gracias a su su diseño, los cubos se unen unos a otros como si fuesen piezas de un puzzle, por lo que su instalación resulta práctica y sencilla. En cuanto al sistema de anclaje entre cubos, se realiza con unos tornillos para ensamblar, permitiendo una fijación perfecta.
Diseño personalizado
Al estar compuesto por cubos unidos entre sí, las posibilidades de diseño son enormes. Es decir, dependiendo del número de bloques básicos y alternativos, se puede utilizar para atracar motos de aguas, embarcaciones pequeñas, medianas o grandes, e incluso, para crear un pantalán.
¿Dónde comprarlo?
En Semirrígidas Cobra puedes realizar una reserva de este novedoso invento que, poco a poco, se va instaurando en las costas españolas. Además, te asesorarán sobre el producto y sus inabarcables posibilidades de configuración.