En esta ocasión os vamos a mostrar el procedimiento que han llevado a cabo nuestros reparadores para aplicar pintura antifouling en una semirrígida Cobra Sailing. ¿Quieres ver cómo ha sido el proceso? Entonces, sigue leyendo el post.
Paso 1: Limpiar el casco de la embarcación
El primer paso es eliminar todos los restos de suciedad y agentes marinos que se han ido incorporando al casco de la embarcación durante su estancia en el mar. Para ello, dependiendo de la cantidad de costras y suciedad existente, se recomienda usar agua a presión para retirarlas.
Paso 2: Lijado de la superficie
Una vez la superficie está más o menos limpia, el siguiente paso es retirar las capas del antiguo antifouling. Si no se hiciese podría desembocar en un grosor excesivo que provoque grietas o un despegado de la nueva capa de pintura. Para conseguir un lijado perfecto, nuestros reparadores han hecho uso de una lijadora eléctrica para dejar el casco totalmente liso. En cambio, para los bordes, han procedido a un lijado manual para evitar que queden zonas sin lijar.
Paso 3: Imprimación
Después de lijar la superficie y retirar los restos de polvo existentes tras retirar la capa de pintura anterior, nuestros expertos han procedido a aplicar una capa de imprimación. Con ella, además de asegurar un color uniforme por el casco, garantiza una completa adherencia de la nueva capa antifouling. Este paso es muy importante, ya que la capa anterior de pintura podría ser incompatible con el nuevo anti incrustante.
Paso 4: Pintado
Por fin llegamos paso más deseado. Y el que más suele gustar a quienes lo ejecutan: el pintado. Una vez secada la capa de imprimación, nuestros reparadores han aplicado una capa uniforme de antifouling en color negro haciendo uso de un rodillo especial. Con este rodillo se evita el exceso de pintura que pudiera aparecer en ciertas zonas.
Paso 5: Revisado y perfeccionamiento de los bordes
Tras aplicar la capa de pintura y esperar el tiempo suficiente para su secado, nuestros restauradores han utilizado una lámpara portátil para comprobar el perfecto pintado del casco. Durante este paso, han utilizado un pincel para corregir las zonas donde no ha llegado el rodillo. De este modo se pueden perfeccionar los bordes.
Y… ¡voilà! Con la aplicación del antifouling en la semirrígida Cobra Sailing ya estaría lista para volver al agua y preparada para repeler a los agentes marinos con objeto de mantener el casco como nuevo.